martes, 6 de julio de 2010

"Pensé que todos los hombres olían así"

"Pensé que todos los hombres olían así"

Nos cuenta Plutarco, que uno de los enemigos del rey Hieron I, tirano de Siracusa (466 a. de C.), se burlaba insistentemente de su mal aliento.

El monarca, desconocedor de su problema de halitosis, fue inmediatamente a los aposentos de su esposa para reprocharle duramente que nunca le hubiese advertido de lo mal que olía.

La Reina completamente perpleja, le respondió: “Pensé que todos los hombres olían así”.

Y ese es el verdadero drama de los bolivianos, pensamos que todas las cosas son así, o como escribió Cayetano, la famosa frase popular, “así nomás había sido”.

Lo peor de todo, es que esa, es la base principal del pensamiento de nuestros gobernantes, la administración de la inercia, la mediocridad como credo, haciendo de la ignorancia no una desgracia sino una virtud.

“Aquí pasa todo y no pasa nada” decía Víctor Paz a quien, los que escriben la historia, le atribuyen ser el “mayor estadista” de la historia republicana, “Pensé que todos los estadistas eran así”, pero tenía razón: El cambio no existe, ¿o será que no nos conviene que exista?.

Evo morales ha declarado que Cuba es una Democracia, obviamente cree que “todas las democracias son así”, ergo Bolivia es uno de los países más democráticos del mundo, el otro más democrático aún es Venezuela.

Pero el tema de fondo es la resignación de millones de bolivianos a vivir en ESA democracia, donde está prohibido PENSAR DIFERENTE, esa democracia que ha eliminado de facto al primer poder del Estado (el Legislativo), donde sus líderes se dicen ser de izquierda pero que les encanta vivir en la derecha, donde se judicializa al opositor, donde la policía y el ejército se preocupan más de caerle bien a los mandatarios en lugar de ver la seguridad de los ciudadanos, donde el Estado no existe y la mayor prueba de ello es la ausencia de seguridad ciudadana.

Nuestro espíritu democrático tiene callo, ya no duele.

“Pensamos que todas las democracias huelen así” ya no nos asquea nada, refugiada en sus getthos la mayoría de los ciudadanos opta por mirar a otro lado para no sentir el tufo, por la justificación que siempre empieza “pero los anteriores gobiernos…”, porque es más fácil así; Y hasta hay intelectuales que lo justifican con solidas argumentaciones dialécticas, no sé si lo hacen por miedo o por oportunismo.

Esta democracia del terror que nos ha hecho retroceder 60 años en la historia, pero con San Románes modernos. Aunque muchos métodos de hoy son muy parecidos a los de la "Revolución" del 52.

Autocensurados, o nos unimos al “proceso de cambio” porque si no mañana dejaríamos de marcar tarjeta o dejaríamos de hacer negocios con el gobierno o somos "retrógradas" marginados.

El Movimiento al Socialismo no entiende que Bolivia necesitaba dar un paso al frente en la evolución democrática, con el respeto a la existencia de partidos políticos, con la concertación de leyes de verdad estructurales, no de los bodrios mal hechos que solo son parches acomodaticios cuyo único fin es el de destruir y aniquilar a la oposición y perpetuar un modelo que lo único que propone es la construcción (?) de un estado fallido.

Logros de este gobierno los hay, pero no son gracias a, sino a pesar de, porque en el fondo la inercia se resume a: “que todo cuerpo en movimiento tiende a seguir en movimiento y todo cuerpo en reposo tiende a seguir en reposo”.

Ojalá mis colegas oficialistas se dieran cuenta del magnífico y maravilloso poder político, que tienen en la Asamblea Plurinacional, que los hace más fuertes aún que el Presidente, y que tienen en sus manos la increíble oportunidad histórica de hacer una Bolivia de verdad, ojalá que se dieran cuenta, pero ¿cómo podrían hacer eso si no conocen otra forma de democracia? Una democracia con halitosis a la que hace mucho nos hemos acostumbrado.

sábado, 24 de abril de 2010

Los Pollos del Emperador

Los Pollos del Emperador

Hans Christian Andersen, fue un escritor y poeta danés, famoso por sus cuentos para niños, entre ellos "El patito feo" y "La sirenita".

Otro de sus cuentos famosos, EL TRAJE NUEVO DEL EMPERADOR, nos relata la historia de un par de pillos que se hacen pasar por tejedores, llegan a la ciudad donde vive un Emperador apasionado por su vestimenta, y van corriendo el rumor entre los movimientos sociales, de que ellos pueden tejer una tela increiblemente hermosa, pero que no la pueden ver ni los idiotas ni los que no esten aptos para sus cargos.

Luego de pedir mucho oro, plata, piedras preciosas y cheques venezolanos, fueron visitados por dos funcionarios públicos que se alarmaron por no ver nada en el telar, pero antes de opinar, pensaron que si decian que no veian nada, perderían sus cargos, con miedo a los fiscales, digo…, al comentario de los miembros de la corte, solo emitieron fallos a favor de los tejedores.

Hasta que llegó el día del discurso, digo… de que los tejedores llegaron a la Cumbre de su “obra” y la presentaron al Emperador, la corte entera vio al Emperador desnudo y nadie se atrevió a decir que el Emperado estaba así, este pensó que o era un idiota o no estaba apto para el cargo, pero decidió “meterle nomás”, total los abogados, digo… los sastres lo arreglarían todo.

Salió al balcón, detrás de él estaba todo el alto mando militar que no podía evitar sonreir ante esa brillante exposición, todo el mundo aplaudió y gritaban vivas, bravos y hurras, hasta que unos diputados de la oposición gritaron “pero si el Emperador no lleva nada”.

Entonces ante el escarnio público y mundial el vocero de su majestad acusó a los medios de comunicación y a los diputados de oposición de no tener la capacidad de ver tan maravilloso traje.

Indignados los miembros de la corte oficialista se retiraron a comer pollos con Coca Cola.

Y Colorín Colorado este cuento se ha terminado.

O continúa??

Andrés Ortega T.

Diputado de la República de Bolivia

Socialismo clásico Vs Socialismo del siglo 21

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